Los potitos de carne aportan el alimento y nutrientes necesarios para el día a día de tu bebé, con ellos podrás empezar a introducir la comida sólida en su dieta gradualmente. Las carnes constituyen la tercera etapa de la alimentación complementaria del bebé, será el primer alimento de origen animal que probará el niño, por lo que habrá que introducirlo de forma progresiva y observar su reacción. La carne contiene proteínas y vitaminas necesarias para el crecimiento del niño y el completo desarrollo de las defensas.