Los calienta biberones eléctricos ayudan a calentar la leche de forma homogénea, permitiendo que la temperatura aguante durante al menos media hora, sin necesidad de volver a calentarlo. Siempre es aconsejable comprobar la temperatura del biberón, antes de ofrecérsela al bebé, para evitar que el pequeño pueda quemarse. No es recomendable dejar el biberón dentro de estos aparatos más tiempo del indicado, ya que puede aumentar la posibilidad de que la leche se contamine.