Gracias a las infusiones infantiles, podemos llegar a combatir dolencias gástricas en los niños, como indigestión, gases e incluso nerviosismo. Además de problemas gástricos, las infusiones para niños también son utilizadas para combatir trastornos de sueño, como el insomnio infantil o el sueño nervioso que impiden a muchos niños descansar como necesitan.