Cabellos salvajes, mechones desordenados, rizos encrespados… El encrespamiento, un enemigo natural del cabello, que dificulta su peinado y opaca su brillo. Este contratiempo capilar del que seguro has oído hablar, nos regala constantes momentos de cabellos indomables. Pero ¿sabes por qué se produce? Y mucho más importante, ¿sabes cómo eliminar el encrespamiento?
Antes de desvelar los secretos que giran en torno al encrespamiento, debemos responder a una pregunta inicial: ¿de qué está hecho el cabello?
El cabello está compuesto por proteínas, lípidos, oligoelementos, aminoácidos, sales y pigmentos. Una retahíla de componentes que nada harían sin el agua, sustancia que conforma la fibra capilar en su mayor parte. En ella se hallan las claves para poder controlar el encrespamiento. ¡Sigue leyendo!
¿Por qué nos persigue el encrespamiento?
Muchas personas han experimentado tener el cabello “frizz”. Este efecto frizz o encrespamiento no es otra cosa que el indicativo de que la fibra capilar está deshidratada. Ante la falta de agua y al ser poroso, el cabello busca esa hidratación en la humedad del ambiente. En concreto, son las fibras de queratina las que sienten esta atracción fatal por la humedad, llegando a absorber hasta una tercera parte de su propio peso en agua.
Cuando el cabello ha encontrado la hidratación que le faltaba, tal y como pasaría con una esponja, su forma cambia sin que puedas controlarla. Es en este punto en el que aparecerán las puntas abiertas, la textura áspera y la falta de definición que caracterizan al encrespamiento. De este modo, si vives en zonas húmedas o con una alta contaminación, probablemente sufrirás mucho más el problema del cabello encrespado.
Por su parte, los cabellos ondulados, con su textura porosa y abundante suelen ser los que más lo sufren. Los rizos pierden su definición, las puntas se descontrolan, los largos se comprimen y la textura se convierte en más oscura e indócil.
Pero, ¡no desesperes! A continuación, te dejamos unos tips que pondrán punto y final a este antiestético efecto.
¿Cómo quitar el encrespamiento del pelo?
Incluye productos hidratantes en tu rutina capilar.
Una buena rutina de lavado es imprescindible si queremos controlar el encrespamiento. Contar con productos ricos en agentes hidratantes y reestructurantes contribuye a reducir la porosidad del cabello y a mantenerlo nutrido. Ingredientes como el aceite de argán, la manteca de karité o la queratina, son buenos aliados que nos permiten retomar el control sobre nuestro cabello.
Evita los champús con alcohol.
Los champús que usamos normalmente contienen sulfatos, lo que provoca que nuestro cabello se encrespe más fácilmente. Por ello, es recomendable que leas bien las etiquetas de los champús y elige alguno que tenga glicerina.
Se acabó el frotar.
Tanto si vas a aplicar el champú, como si vas a secarte el cabello con una toalla, no lo frotes con demasiada insistencia. La superficie del cabello es similar a las escamas de un pez y, si ejercemos demasiada fricción, abrimos y debilitamos la cutícula. Lo ideal es dejar secar el pelo de forma natural al aire.
Intenta aclarar el pelo con agua fría.
Siempre que puedas utiliza agua fría en la ducha, esto hará que las cutículas queden selladas y el pelo tendrá un aspecto más brillante y liso.
Utiliza un buen protector térmico.
Las altas temperaturas son la principal causa de deshidratación del cabello y un cabello deshidratado es mucho más susceptible al encrespamiento. Por ello, antes de utilizar planchas de pelo, secadores o rizadores, es aconsejable aplicar un protector de calor para el pelo que ayude a proteger la fibra capilar de la acción de las altas temperaturas.
Aplica aceites caseros.
No hay nada más nutritivo que el aceite. Te aconsejamos que antes de lavarte el pelo te apliques aceite de coco o de argán de medios a puntas y déjalo actuar unos minutos.
No lo laves en exceso.
Los cabellos secos suelen durar más tiempo limpios. El hecho de lavar el pelo muchas veces provoca que se elimina la grasa, facilitando así el encrespamiento. Por ello, intenta aguantar más el tiempo entre los lavados y recuerda que siempre puedes usar champú en seco. Te contamos cómo.
Sella la cutícula.
Las puntas son la zona del cabello más porosa y la más antigua, por lo que necesitan atención especial para mantenerse en buen estado. Aplicar sérums hidratantes en esta zona ayuda a sellar la cutícula. Con esta acción tan sencilla, conseguiremos unas puntas menos porosas, menos susceptibles a la pérdida de humedad y, por ende, al encrespamiento.
Utiliza un cepillo de cerdas de jabalí o peine de dientes anchos.
Igual nunca has oído hablar de ellos, pero cepillar con un cepillo de cerdas de jabalí antes de lavarlo, hará que los aceites que genera tu cuero cabelludo naturalmente, queden repartidos por todo el pelo. Además, usar un peine de dientes anchos no quebrará tu cabello y hará que no se encrespe.
Cuidado con el sol.
Tienes que saber que el sol, su exposición, sus altas temperaturas y sus rayos, favorecen el encrespamiento. Así que, utiliza productos capilares con protección solar para que no se dañe.
No hay más secretos que el trío de indispensables: Hidratación, protector térmico y sérum. Estos son los tres pilares esenciales para controlar el encrespamiento y poner fin a su reino del cabello descontrolado. Nutrir e hidratar la fibra capilar es, además de necesario, la mejor garantía para tener una melena controlada y, sobre todo, sana. ¿Tienes otros consejos?