¿Qué da más pereza que lavarse la cara antes de ir a dormir? Exacto, lavarse los dientes. Lo bueno es que si haces lo primero, lo segundo, seguro que te sale automático. Lo malo es que puede que la pereza haga que no le prestes atención ni a tu rostro ni a tus dientes y, amiga, la salud bucodental es tan importante como cualquier otra. Una mala higiene bucal puede provocarte incluso dolores de espalda, a parte de las conocidas caries.
La boca está conectada con diferentes partes de nuestro cuerpo aunque no seamos conscientes. Así como en la reflexoterapia cada sección del pie afecta a una parte del cuerpo, cada diente corresponde a una parte de nuestro organismo. Por ejemplo, las enfermedades que afectan a las encías (periodontales) están estrechamente relacionadas con la diabetes o las enfermedades cardiovasculares, o con los partos prematuros en embarazadas. Se debe a que la periodontitis estaría asociada a la liberación de unas hormonas llamadas prostaglandinas encargadas de las contracciones a la hora del parto.
¿Qué problemas puedes sufrir con una mala higiene bucodental?
- Halitosis. Tener mal aliento es uno de los problemas más fáciles de desarrollar si no te lavas los dientes frecuentemente y bien. Las bacterias que provocan la halitosis viven debajo de la saliva y se encargan de descomponer los restos de alimentos. Generan azufre y ácidos que producen un olor muy desagradable. Ésta bacterias también viven en encías infectadas o dientes con infecciones internas que pueden llegar al hueso de la mandíbula y generar necrosis.
- Lesiones musculares y dolor de espalda. Te has propuesto ir tres veces al gimnasio, pero es posible que no sirva de nada sin un buen calentamiento y un buen cepillado de dientes. Las mismas bacterias que provocan las caries y otros problemas en nuestro organismo, provocan que el músculo se fatigue antes a causa del desequilibrio de los minerales que intervienen en la contracción muscular. Con un músculo fatigado, es fácil sufrir desgarros, tendinitis o problemas en las articulaciones. Además, las infecciones bucales pueden ocasionar molestias en las vértebras y la mala oclusión bucal, desestabiliza los músculos generando en ambos casos, dolores de espalda.
- Artritis. Las articulaciones también sufren la mala salud de dientes y boca. Una periodonitis severa hará que las bacterías generes subproductos tóxicos que viajen con la saliva al interior del estómago y a la sangre. Así llegan a las articulaciones y provocan inflamaciones.
- Infarto de miocardio: Las enfermedades de las encías son un factor de riesgo para sufrir un infarto debido a las bacterias. Las limpiezas bucales reducen la inflamación que causa el crecimiento de las bacterias por lo que las posibilidades de sufrir una patología cardíaca.
- Gastritis. Cuando faltan pieza dentales y muelas, se mastica peor y la comida se tritura menos por lo que los alimentos llegarán en mayores trozos al estómago y costará más digerirlos. Con el tiempo, este trabajo de más puede generar exceso de jugos gástricos y con ellos problemas estomacales crónicos.
Como ves, las caries son problemas de salud “leves” comparado con un infarto o una lesión muscular. Quitarse la pereza de lavarse los dientes es la prevención perfecta para mantener todo tu cuerpo saludable. Recuerda limpiar los dientes de arriba a abajo, esperar unos 30 minutos después de comer para que el Ph de tu boca se estabilice y sobre todo, lavarte los dientes antes de ir a dormir, momento en el que las bacterias toman el control de la boca ya que producimos menos saliva.