Las cremas hidratantes para pieles muy secas ayudan a reparar la barrera protectora de la piel, regeneran las grietas, arañazos, quemaduras y otros daños debidos a la sequedad y la falta de hidratación. Suavizan la piel, sobretodo las zonas más ásperas y rugosas del cuerpo, como los codos o las rodillas. Alivian las molestias como rojeces, picores y la descamación de la piel. Reparan, regeneran y alivian los síntomas de las pieles muy secas con xerosis.