Endocare Tensage Crema 50ml
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
unidades limitadas
La crema hidratante facial es un producto de cuidado diario que ayuda a proteger nuestra piel y mantener la barrera natural, hidratando el rostro en profundidad para prevenir la sequedad, deshidratación y posibles imperfecciones que aparecen con el paso del tiempo. Además, las hidratantes con colágeno, ácido hialurónico, niacinamidas o antioxidantes ayudan a prevenir eficazmente el envejecimiento prematuro de la piel y mantenerla humectada, nutrida, joven y suave durante más tiempo. La cara es la zona del cuerpo más expuesta a los factores ambientales y climatológicos, que pueden alterar la barrera natural de la piel, lo que puede hacer que nuestro rostro sufra deshidratación y sequedad y que comiencen a aparecer las primeras arrugas faciales.
¿Cómo hidratar el rostro correctamente?
Para un buen cuidado facial es recomendable seguir una rutina diaria de limpieza e hidratación, en la que debe ser igual de importante tanto la limpieza del rostro, con el limpiador Cerave, como su hidratación, con la crema facial Eucerin, la crema de La Roche Posay, las cremas de Avène, las cremas Nivea, o cualquier otra marca que se ajuste a nuestras necesidades específicas. Además de utilizar cremas o sérums hidratantes a diario, debemos retirar las impurezas, células muertas e impurezas que puedan quedar en el rostro, y posteriormente aplicar alguna loción tonificante. De esta forma conseguiremos que la crema penetre en las capas más profundas de la piel, humectando y reparando los daños ocasionados por factores como el sol, la alimentación o la contaminación, entre otros.
Limpiar la piel y retirar restos de suciedad o impurezas.
Utilizar un tónico o loción tónica que cierre los poros y humecte la piel.
Usar un sérum vitamina C, para aportar luminosidad, u otro tipo en función de las necesidades de cada piel.
Hidratar el rostro con una crema hidratante que se ajuste a nuestro tipo de piel, masajeando suavemente el rostro de forma ascendente.
Una correcta hidratación facial es esencial para mantener una piel saludable, ya que la sequedad del rostro puede dar paso a las primeras arrugas o líneas de expresión, que pueden aparecer desde una edad temprana si no prestamos atención a las necesidades de nuestra dermis. Gracias a las cremas faciales, y otros productos hidratantes para la cara, es posible recuperar la luminosidad y la juventud de nuestro rostro en poco tiempo.
¿Cómo elegir tu crema facial?
Existen muchos tipos de cremas faciales hidratantes y otros productos que también ayudan a nutrir la piel del rostro, como algunos sérums La Roche Posay, aceites o mascarillas que mantienen la humectación de la piel durante más tiempo. La mayoría de las cremas faciales hidratantes cuentan con propiedades reafirmantes, antiarrugas, reparadoras y protectoras, que ayudan a combatir la sequedad de la piel y a reducir los signos de la edad. Además de mantener y recuperar la firmeza de la piel, evitando la falta de elasticidad y potenciando nuestra belleza natural.
Para elegir correctamente nuestra crema facial debemos tener en cuenta varios factores importantes, entre ellos la edad, ya que existen diferentes composiciones y principios activos para cada etapa; el tipo de vida que llevamos también es un factor que puede reflejarse en nuestra piel, dependiendo de si pasamos muchas horas al aire libre o si pasamos muchas horas en la oficina, ya que esto también repercute en nuestro tipo de piel, siendo más o menos grasa o estando expuesta a agentes externos como el sol o la polución. El tipo de piel de cada persona, ya que no necesitan los mismos cuidados una piel seca o extremadamente seca que una con tendencia acneica o exceso de sebo. La estación del año también debe ser un motivo para cambiar nuestra crema facial, ya que dependiendo de la temperatura, la radiación solar o el frío y el viento, las necesidades de nuestra piel serán diferentes, igual que para para cada momento del día, es decir, necesitaremos aplicar diferentes cremas hidratantes si es de día como si es de noche, ya que es durante este período cuando la piel se regenera, y durante el día será recomendable aplicar una crema con protección solar, que nos proteja de los rayos ultravioleta.