Postres lácteos elaborados para la alimentación complementaria de los bebés. Con una composición a base de proteínas de la leche, que contribuyen a cubrir las necesidades nutricionales de los más pequeños. Son buena fuente de calcio que ayuda al normal desarrollo de los huesos y dientes. Con una textura cremosa, tienen un agradable sabor natural. Sin conservantes ni colorantes. Indicados para niños a partir de los 6 meses de edad.