En las pieles con eccemas hay que cuidar sobre todo la zona de talones, codos y rodillas tratando de mantener la hidratación y calmar la sequedad y el enrojecimiento. Una de las mejores soluciones son las cremas y pomadas para eczemas.
Para pieles sensibles y atópicas, es importante elegir productos hipoalergénicos y sin fragancias. Utiliza limpiadores suaves y evita el agua caliente. Hidrata la piel con cremas específicas para pieles sensibles. Evita prendas ajustadas y utiliza detergentes suaves. Además, es recomendable minimizar la exposición a factores desencadenantes, como cambios climáticos extremos.