Salud
¿Dolor de oído? Tiene fácil solución.
Desde que se toma un medicamento hasta que se produce su efecto pasa un cierto tiempo. Este periodo de tiempo se denomina periodo de latencia, y puede ser de minutos, horas, días o incluso semanas.
Son muchos los factores que influyen en el tiempo que tarda en producirse el efecto. Tras su administración, el fármaco debe llegar primero al lugar donde debe actuar. Esto suele ocurrir a través del torrente sanguíneo. Así que cuanto más rápido llegue la sustancia a la sangre, más rápido puede hacer efecto. Es por ello por lo que la forma de dosificación y el método de administración desempeñan un papel decisivo.
13 factores que influyen en la latencia
Los principales factores que influyen en el periodo de latencia son:
1. La forma de administración y cómo se absorbe en el cuerpo.
Como es lógico, la aplicación por inyección, directamente en la vena, tiene el efecto más rápido.
Las inhalaciones para enfermedades de las vías respiratorias también suelen tener un efecto rápido, ya que la sustancia activa llega al lugar de acción en los pulmones directamente a través del aire respirado. A diferencia de los aerosoles, los comprimidos y otros medicamentos sólidos deben disolverse primero en el estómago y los intestinos para luego entrar en el torrente sanguíneo a través de la mucosa intestinal.
Los medicamentos en forma líquida (gotas, jarabes, comprimidos efervescentes…) actúan más rápidamente porque no tienen que disolverse primero en el organismo. Aquellos que se disuelven directamente en la boca pueden ser absorbidos por el organismo con mayor rapidez, posiblemente incluso a través de la mucosa oral.
2. Dónde se absorbe el medicamento y dónde debe actuar
Cuanto más largo y complejo sea el camino desde el punto de aplicación hasta su destino, más tardará el fármaco en hacer efecto.
3. El tiempo que tarda el medicamento en disolverse, ser absorbido por el organismo y distribuirse.
A menudo, el medicamento tiene que disolverse primero en el cuerpo, como ocurre con los comprimidos en el estómago y los intestinos, para llegar después al torrente sanguíneo y, por tanto, a su destino. Y esto hace que su efecto se demore el tiempo correspondiente (por ejemplo, de 30 a 90 minutos en el caso de los comprimidos para el dolor de cabeza). Se habla de efecto sistémico cuando la sustancia activa se distribuye en el organismo a través del torrente sanguíneo.
4. La dosis de principio activo
Sólo cuando se alcanza una determinada concentración de ingrediente activo en el organismo se hace patente su efecto.
5. Las propiedades, la estructura y el mecanismo de acción del fármaco
Algunos medicamentos tardan mucho tiempo en surtir efecto. Con los antidepresivos, por ejemplo, esto puede llevar de varios días a semanas.
6. En qué postura se ingiere el medicamento
El fármaco puede pasar por el esófago más rápidamente en posición vertical.
7. Si el principio activo debe convertirse primero en su forma efectiva en el organismo.
Algunos medicamentos no pueden administrarse en su forma activa. Para que tengan algún efecto, primero deben convertirse en el cuerpo.
8. Si se debe tomar el medicamento con o sin comida
Los medicamentos deben tomarse a menudo con el estómago vacío. Comer al mismo tiempo afecta al fármaco, a su solubilidad y a su absorción en el organismo. Si se come algo, beber mucho líquido acelerará el inicio de la acción. Sólo en el caso de las sustancias activas poco solubles en agua, tomarlas con los alimentos tiene un efecto positivo. Siempre deben seguirse las instrucciones del prospecto.
9. Cuánto líquido se toma con la comida y a qué temperatura
Si hay que disolver primero un medicamento, la cantidad adicional de líquido ingerido juega un papel decisivo.
Por regla general, cuanto más caliente esté el líquido, más rápida será la disolución. Sin embargo, la disolución ya en la boca no suele ser deseable.
10. Con qué líquido tomar el medicamento
El agua es lo mejor para tomar cualquier medicina, ya que es lo que tiene menor efecto sobre el mismo. Tomarlo con leche o zumo no es aconsejable en muchos casos, ya que puede influir en la eficacia.
11. Regularidad de uso
En el caso de la medicación a largo plazo, es necesario un uso regular y constante, según las instrucciones del médico, para conseguir el mejor efecto posible.
12. Tomar otros medicamentos de forma complementaria
Muchos medicamentos se influyen mutuamente. El efecto puede reducirse, aumentarse, acelerarse o retrasarse.
13. Factores individuales del paciente
Cada cuerpo es diferente y puede reaccionar de forma distinta a un mismo medicamento. Por ejemplo, la duración del paso intestinal y, por tanto, la absorción en el torrente sanguíneo puede variar.
