Ocean friendly, sea friendly, reef safe, biodegradable, eco-friendly… ¿Te suena? Los protectores solares, a menudo, incorporan información relevante en su packaging a la que no le prestamos atención, pero ¿y si te digo que el uso tu fotoprotector habitual está prohibido (seguramente) en lugares como la Riviera Maya?
¿Qué es una crema solar biodegradable?
Vale, es cierto que ir de vacaciones a Yucatán no es tan común como pasar los días de verano en la piscina o la playa más cercana de nuestra ciudad, pero a todos nos preocupa el medio ambiente ¿no?
Un protector solar biodegradable es aquel que, al desprenderse de nuestro cuerpo, no contamina el entorno, respetando la flora y la fauna del lugar. Además, cuando el agua que evitamos contaminar es agua dulce, también prevenimos posibles riesgos para las personas. Los ingredientes que debemos evitar a la hora de elegir un protector solar son:
La oxibenzona y la avobenzona.
Los tres “octo”: octocrileno, octinoxato y octisalato.
El ácido aminobenzoico.
El enzacamene.
Tampoco deben contener microplásticos o parabenos. Sé que no es fácil de recordar, pero no te preocupes, si tu fotoprotector es biodegradable ¡vendrá indicado en el envase!
Es importante señalar que, si bien pueden resultar dañinos para la naturaleza, no se ha demostrado que exista toxicidad para las personas en los filtros químicos mencionados y, por lo tanto, se consideran seguros, pero ¿sabías que elegir un protector solar “sin tóxicos” puede tener ventajas en caso de que tu piel sea muy sensible?
¿Cuál es la diferencia entre Sea Friendly y Reef Safe?
Actualmente, no existe regulación en cuanto a etiquetados como “Sea Friendly”, “Reef Safe” u “Ocean Friendly”. Esta terminología puede hacer referencia a que respetan el ecosistema marino de forma general, a que son seguros para los arrecifes de coral… Aunque todos coinciden en lo más importante, y es que se trata de fórmulas mayoritariamente biodegradables y a base de ingredientes inorgánicos.
En este aspecto, podrás encontrar algunas diferencias entre marcas. Por ejemplo, algunas contienen óxido de zinc o dióxido de titano, pero en su forma no nanoparticulada. Esto se hace porque los filtros solares minerales (también llamados filtros físicos) suelen dejar una capa blanquecina visible sobre la piel que algunas personas consideran antiestética. Para evitar ese efecto, se reduce el tamaño de la partícula, dando lugar a nanopartículas que, si bien no suponen un riesgo para la piel cuando el fotoprotector es aplicado como cosmético, sí que tienen un impacto medioambiental negativo.
Entonces ¿qué protector solar debo usar?
Cada vez son más las marcas que ofrecen productos respetuosos con nuestro entorno, como los protectores solares Isdin, cuya fórmula está diseñada para minimizar su impacto en el mar, o la crema solar Hawaiian Tropic que, además, es cruelty free.
En caso de dudas, también es posible optar por una protección solar con sello Bio o Cosmos Organic, como las de SolarTea.
¡Ojo! si quieres pasarte a este tipo de fotoprotectores, no deseches lo que ya tienes en casa. Puedes usarlo como protector solar urbano para el día a día, o para la piscina. De este modo, no se desperdiciará, y podrás aprovecharlo sin perjudicar el medio ambiente.