Los labios son una mucosa de transición, es decir, una piel muy especial que necesita protección extra. No tiene apenas glándulas sebáceas así que no fabrican su propia "crema" hidratante natural, como lo hace la piel.
Por eso, con el frío, el viento, la lluvia, incluso con los cambios de temperatura provocados por la calefacción los labios se secan, agrietan y se cortan.
Por si fuera poco, unos labios agrietados acumulan también bacterias que pueden propiciar infecciones o picor en personas sensibles. Y en algunos casos, incentivar que salgan herpes labiales si eres propenso/a a tenerlas.
Tratamiento para los labios agrietados
Si ya los tienes agrietados, lo mejor será ponerle remedio: hay productos que te pueden ayudar a restaurar la piel de los labios en tiempo récord y además, son reconfortantes.
Si eres fan de los productos naturales, nuestra recomendación es que apliques manteca de karité en los labios agrietados. Formará una película hidratante que te ayudará a restaurarlos y calmarlos. La vaselina labial es también un remedio de toda la vida para hacer frente a los labios irritados y descamados.
Para un tratamiento de choque, el clásico Letibalm es mano de santo. Está formulado específicamente para la delicada piel de los labios y nariz, y se puede utilizar tanto como tratamiento intensivo como para prevenir. Existe en varios formatos, entre ellos stick, tarro o fluido con aplicador.
Protege los labios del sol. Una vez están agrietados, aunque sea invierno, es importante protegerlos si vas a exponerte al sol (por ejemplo, en la nieve). Nuestro favorito: el ISDIN Protector labial SPF50.
Si estás tomando un tratamiento oral anti acné, o alguna medicación que te provoca como efecto secundario unos labios extremadamente secos, te recomendamos productos como el Acniben RX bálsamo reparador labial tiene una composición basada en calmoactive, pantenol y ácido hialurónico que ayuda a reducir la descamación cutánea y activar la regeneración natural de la piel.
Cómo evitar que se agrieten los labios
Hidrátalos a menudo con un bálsamo labial, especialmente antes de salir de casa, después de lavarte los dientes, antes de ir a dormir... el hábito hará que la piel de los labios sea más fuerte y resistente ante el clima.
Evita a toda costa tirar de las pieles sueltas de los labios secos, pues podría empeorar la situación.
Si tu ambiente de trabajo o en casa haces uso de la calefacción, instalar un humidificador es una buena idea para evitar la deshidratación de la piel y los labios.
La piel de los labios también necesita exfoliación. Cuando eliminamos las pieles muertas, la superficie queda lisa y suave. Aplica el exfoliante labial cuidadosamente una vez cada semana con movimientos circulares.
Si utilizas pintalabios, desmaquilla tu piel todas las noches. Lo ideal es que hagas una doble limpieza que elimine maquillaje, y otras impurezas.