La piel grasa suele ser difícil de cuidar ya que se trata de una piel más gruesa que la normal y se caracteriza por tener puntos negros, furúnculos y una gran proporción de acné, además de poros abiertos y cutis brillante. Este tipo de piel necesita muchas atenciones ya que acumula una gran cantidad de impurezas y toxinas que la asfixian y se debe evitar hacer uso de productos demasiado grasos o con aceite.
¿Quieres saber cómo cuidarla de manera correcta? Sigue leyendo.
1. Retira todas las impurezas por la mañana y por la noche: al levantarte, retira las impurezas que se ha acumulado en el rostro mientras dormías con una limpiadora o gel que regule la piel y no la engrase. Los limpiadores para usar con agua van muy bien a este tipo de piel. Al finalizar el día, hay que volver a realizar dicha tarea.
2. Utiliza cremas reparadoras de día y de noche: para que la piel luzca menos brillante, es imprescindible aplicar cremas especiales para pieles grasas. Poco a poco producen un efecto seco e hidratante a la vez que la dejan más lisa y eliminan las espinillas, granos y otras impurezas que surgen a causa de la acumulación de la grasa.
3. Protege tu piel del sol: por el día proteger la piel de todos los factores externos que la envejecen es crucial y es recomendable que la crema sea oil free.
4. Maquillaje: debe ser siempre a base de agua y no de aceite, una buena opción son los polvos compactos mate.
5. Desmaquillante: debe ser para piel grasa y hay que retiralo con abundante agua.
6. Exfolia el rostro 2 veces a la semana: los exfoliantes específicos para pieles grasas ofrecen una renovación celular, son geles con granos muy finos que penetran en el poro y remueven las células muertas.
7.Una vez cada 15 días aplícate una mascarilla: sirve para suavizar la piel, refrescarla e intentar que no salgan granos. Déjala actuar entre 10 y 15minutos.
8.Duerme con el pelo recogido: al igual que nuestra piel, el pelo refleja de forma fiel nuestro interior. El alcohol, el tabaco y los malos hábitos de alimentación nos hacen estar mal por dentro y mal por fuera, con lo que ponemos en peligro nuestra piel. Es recomendable también cambiar la funda de la almohada y las toallas dos veces por semana, para que la grasa del rostro que queda en ellos no ensucien los poros y corran riesgo de infección.
En el mercado hay muchos productos que cuidan las pieles grasas y varias de ellas son a base de agua y están exentas de aceites. Algunas incluso poseen protección frente al sol.
Si tienes la piel grasa y quieres cuidarla correctamente mímala a fondo y verás como mejora.