Un glucómetro, o medidor de glucosa, es un instrumento digital que se utiliza para conocer la cantidad y concentración de azúcar en sangre. Gracias a estos dispositivos de uso doméstico podemos saber con exactitud el nivel de glucosa sin necesidad de salir de casa, y pueden utilizarse tanto en adultos como en niños. Estos aparatos miden la glucosa en sangre.
Conocer nuestro nivel de azúcar en sangre con un glucómetro digital es tan sencillo como hacer una pequeña incisión en un dedo, normalmente, con la lanceta o punzón que ya contiene el dispositivo, después de la incisión debemos extraer una pequeña cantidad de sangre, con una gota será suficiente, y depositarla en la pequeña tira reactiva que contiene el glucómetro. Inmediatamente, el dispositivo, nos aportará información sobre nuestro nivel de glucosa.
Para medir correctamente nuestros niveles de azúcar es recomendable seguir algunas pautas, y así evitar posibles errores que de lugar a mediciones incorrectas:
1. Lavarse las manos correctamente
2. Insertar tira reactiva en el dispositivo
3. Pinchar la punta de uno de sus dedos para extraer una gota de sangre
4. Poner dedo en la tira reactiva y esperar los resultados
Los glucómetros digitales cuentan con una pequeña pantalla que muestra la concentración de glucosa en sangre, para interpretar esta información correctamente debemos saber que los glucómetros muestran dos tipos de datos, principalmente, la fotometría de reflectancia, que hace referencia al color que adopta la sangre una vez que ha reaccionado a los componentes de las tiras reactivas, y que mide la cantidad de luz reflejada por la misma tira, y el otro dato principal es la tecnología electroquímica, que se refiere a cantidad de corriente electroquímica que pasa a través de la tira reactiva, siendo proporcional a la cantidad de glucosa en sangre. Gracias a esta información podemos interpretar los niveles de azúcar.
Los niveles relativamente normales de azúcar en sangre dependen de varios factores, como el peso, la edad o el momento del día en el que midamos la concentración de glucosa y, sobre todo, si se trata de una persona diabética o no. Por eso, es aconsejable utilizar nuestro glucómetro en ayunas o, al menos, dos horas después de comer. Los niveles óptimos de glucosa, en personas no diabéticas, puede variar entre los 70 mg/dl y los 140 mg/dl, siendo mucho más alto en personas que sufren diabetes, que puede oscilar entre los 140mg/dl y los 200 mg/dl. En cualquier caso, es recomendable consultar con un especialista para estar seguros de cuales son nuestros niveles óptimos de glucosa en sangre. ¡Mide tu glucosa sin salir de casa con los mejores glucómetros digitales!