La producción de gases en el cuerpo, es un proceso digestivo normal que tiene dos formas de explusión: por la boca en a través de eructos y por el recto mediante flatulencias.
Aunque los gases no son una enfermedad en sí misma, sí que pueden convertirse en un problema cuando se dan en exceso y provocan molestias e incluso dolor en el individuo que los sufre. Generalmente se deben a causas relacionadas con los hábitos alimenticios.
La flatulencia consiste en la distensión del estómago o de los intestinos provocada por la acumulación de gases, que pueden tener origen gástrico o intestinal. Esta acumulación de gases, al distender las paredes gástricas intestinales y abdominales, puede generar hinchazón, molestias e incluso dolores que, en algunas ocasiones, pueden resultar graves. Existen complementos alimenticios, en comprimidos o pastillas, que ayudan a disminuir los gases.
El primer paso para evitar los gases es modificar, en la medida de lo posible los hábitos alimenticios. Moderar la ingesta de bebidas gaseosas, fibra y carbohidratos puede ayudarnos a reducir la presencia de gases. También puede ayudar comer más despacio y evitar la entrada de aire mientras comemos y bebemos.
Además de poner en práctica estas medidas, podemos utilizar, como complemento y nunca como sustitutivos, productos y remedios para los gases que ayudarán a poner fin a la flatulencia, bajar la hinchazón, aliviar las molestias y calmar los dolores provocados por la acumulación de gases.