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Los piojos son una especie de parásitos o insectos ápteros, sin alas, que se alojan en zonas húmedas y cálidas, por eso las cabezas de los niños son un lugar idóneo para que estos parásitos proliferen. También hay épocas del año que son mucho más propensas para el contagio de piojos, como la temida vuelta al cole, en la que los niños en edad preescolar, principalmente, suelen tener contacto directo con otros niños y son más propensos a sufrir una pediculosis, o una infestación por piojos. Esta es la primera causa de las plagas de piojos en los niños, y no la falta de higiene o el uso de peines y accesorios de pelo compartidos, como, ya que los piojos no tienen preferencia por los cabellos limpios o sucios.
La pediculosis es un problema relativamente fácil de detectar, debido a los intensos picores que produce, es el síntoma más apreciable de una plaga de piojos, aunque en la mayoría de los casos estos picores se empiezan a notar después de varias semanas conviviendo con estos parásitos, debido a los ciclos de vida de los piojos desde que ponen los huevos hasta que se convierten en piojos adultos.
Los piojos tienen una vida de aproximadamente 28 días, en la que pasan por tres fases diferentes desde que nacen hasta que mueren, huevo o liendre, ninfa y piojo adulto, y es aconsejable acabar con ellos lo antes posible ya que el ciclo puede repetirse cada 3 semanas.
Actualmente existen infinidad de productos y tratamientos antipiojos para niños, que combaten eficazmente los piojos sus liendres, entre ellos encontrarás lociones y champús antipiojos, y aceites esenciales como el árbol de té, un eficaz pediculicida natural que ayuda a eliminar los piojos, además de lociones y sprays anti enredos y accesorios antipiojos para el pelo, como cintas y coleteros para niñas, con repelentes para ahuyentar a los piojos y evitar una plaga.