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El aceite de coco está de moda. Y es que se trata nada más ni nada menos que de una grasa saludable y un ingrediente clave en los tratamientos de belleza. ¡Todo en uno! En el post de hoy hemos resumido exclusivamente para ti todos los datos que (puede que no sepas) sobre el coco y sus usos cosméticos.
¿Fruta o fruto seco?
Empecemos por el principio. ¿Qué es el coco? Aunque parezca increíble el coco es un fruto seco (el más grande de todos) que se obtiene de la palmera. Está formado por una capa gruesa y fibrosa, que es el fruto, y la carne y la leche en su interior, que son propiamente el alimento de dicha semilla.
A parte de ser muy bueno para nuestra salud gracias a sus propiedades hidratantes, antioxidantes, energéticas, reguladoras de la presión sanguínea y remineralizantes, el coco nos proporciona un montón de usos cosméticos para lucir una piel y un cabello radiante.
Usos cosméticos del coco
No nos extraña que el aceite de coco se haya convertido en un “boom” en el mundo de la cosmética y es que podemos utilizarlo para casi TODO.
- Mascarilla capilar. Después de haberte lavado el pelo con champú, puedes aplicarte unas gotas del aceite de medios a puntas y dejarlo actuar durante 5 minutos y aclararlo.
- Aceite corporal. Al salir de la ducha, puedes utilizarlo para hidratarte tooodo el cuerpo.
- Bálsamo labial. También es súper eficaz para los labios cortados ya que los hidrata en profundidad.
- Contorno de ojos. Además, te puedes poner un poquito en las ojeras para reducir las bolsas y las arrugas de la zona.
- Desmaquillante. Y por si fuera poco, el aceite de coco también ayuda a eliminar el maquillaje. ¡Increíble!
Cuéntanos, ¿sabías que el coco era un fruto seco? ¿Lo utilizas en tu rutina beauty? ¿Cómo?
