Es una combinación de sustancias inodoras que actúan como hormonas sexuales femeninas, aumentando la atracción sexual. Se basa en el poder de atracción natural de las feromonas para captar el interés masculino. No presenta ningún olor, por lo que puede combinarse como más se desee con cualquier tipo de fragancia. El cerebro recibe la señal ante un estímulo positivo y desencadena unas reacciones que, como consecuencia, provoca en el destinatario una atracción y anhelo hacia la persona que las ha liberado.