Crema de limpieza suave para el cuidado de la piel del cuerpo con aroma a flor de durazno, ámbar, maderas y rosa blanca. Cuenta con una textura no espumante, que promueve un tacto sedoso. Contribuye a eliminar la suciedad de la piel sin generar irritaciones ni desbalances en el pH cutáneo. Elaborada a base de aceites de oliva virgen extra, coco, manteca de karité, rosa, aceite de almendra dulce, pepita de uva, oliva, extracto de cáscara de nuez, salvia y romero. Favorece la protección de la epidermis y promueve una acción hidratante. Apta para veganos. Adecuada para pieles muy secas e hidromasaje. Dermatológicamente testada.