Macarrones sin proteínas que contribuyen a reducir la sensación de cansancio y/o fatiga. Cuentan con fibras que ayudan a mantener una buena digestión y a regularizar el tránsito intestinal. Además, se pueden consumir solos o con salsas, verduras, cremas y carnes. Elaborados a base de fécula y patata, que favorecen el metabolismo energético normal.