Los dientes sensibles con las encías frágiles requieren una atención especial. Deben de limpiarse suavemente para evitar una abrasión suplementaria pero al mismo tiempo con intensidad suficiente para que los dientes perduren sanos. Unos dientes limpios, unas encías sanas y una mucosa bucal reforzada son la mejor protección frente la placa dental (película de bacterias sobre los dientes) y el sarro.