El glucomanano es una fibra dietética soluble procedente de la planta de konjac, una planta asiática con beneficios contrastados en su utilización como coadyuvante de dietas bajas en calorías y en el mantenimiento de los valores normales de colesterol en sangre.
Al tratarse de una fibra con gran capacidad para captar agua y aumentar su volumen (convirtiéndose en un gel), su ingesta en forma de complemento alimenticio proporciona sensación de saciedad, así como una ayuda para mantener unos valores normales del colesterol y reducir los picos de glucosa en sangre. También puede contribuir a mejorar el tránsito intestinal. Pero, por lo que es más conocido el glucomanano es porque puede dar soporte en procesos de pérdida de peso, siempre en el contexto de una dieta hipocalórica pautada por un/a profesional y un estilo de vida activo.
Se recomienda tomarlo según las instrucciones del fabricante y el criterio profesional pertinente. Debe ingerirse junto a una buena cantidad de agua y evitarse su uso antes de ir a dormir y en personas con problemas de deglución. Un exceso en la toma de glucomanano puede ocasionar gases, molestias abdominales, obstrucción intestinal o dificultar la biodisponibilidad de algunos medicamentos. Por este motivo, se aconseja espaciar la toma del complemento de la de la medicación para evitar que se altere su absorción a nivel intestinal.
Las personas diabéticas o con otras enfermedades crónicas deben consultar con un/a profesional sanitario/a antes de tomar el complemento.