Raspador de callosidades con doble superficie que ayuda a retirar y exfoliar la piel gruesa de los pies. Contribuye a limar las imperfecciones de las zonas muy secas de los talones y asperezas en los dedos, sin dañar la epidermis. Contiene un mango de plástico, plano y largo, que facilita la utilización. Cuenta con un hueco en el extremo para colgar y tener a la vista. El cabezal contiene dos grosores diferentes de abrasión, adecuado para tratamientos de higiene profesionales y domésticos. Es fácil de higienizar y reutilizable.