Spray recomendado para los tapones de cerumen que se forman en adultos y niños a partir de 6 años de edad. La cera es producida de manera natural por el cuerpo para proteger el canal auditivo de las bacterias. Puede suceder que el cerumen no fluya correctamente y, en consecuencia, provoque un tapón. Si esto ocurre, la sensación puede generar acúfenos e incluso provocar una mala audición. Su composición de agua de mar y glicerina, favorece la descomposición de la cera y favorece su disolución y evacuación. HUMER spray se presenta en un envase con un difusor ergonómico y es seguro para no dañar los tímpanos. No usar este producto después de una intervención de mastoides o en caso de dolor de oídos. Mantener fuera del alcance de los niños.