Limpia en profundidad y ayuda a eliminar el exceso de grasa, mientras purifica. Entre sus activos principales se encuentra el té verde, que resulta ser un potente antioxidante con acción anti-inflamatoria y antiedad. El ginkgo biloba también actúa como un agente antioxidante, pero además posee propiedades contra el envejecimiento de la piel. El aceite árbol del té, es conocido por sus propiedades antifúngicas, antivíricas y antibacterianas. Por último, la niacinamida ofrece múltiples beneficios a la piel como ayudar a reducir las líneas de expresión y arrugas, reducir el enrojecimiento, mejorar la renovación celular y reducir la apariencia de manchas oscuras para conseguir una mayor luminosidad en la piel.