El agua micelar ayuda a limpiar la piel del rostro por completo de restos de maquillaje, incluso el resistente al agua, o suciedad ambiental producida por la contaminación de las ciudades, sin necesidad de aclarado. Además ayuda a que los poros no se bloqueen y que el resto de tratamientos penetren mejor en la piel. Su fórmula está enriquecida con oligoelementos que revitalizan las células cutáneas.