Nuk Chupete Silicona Hello Adventure 6-18M 2 uds
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Chupetes que ayudan a clamar al bebé de 6 a 18 meses de edad
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Chupetes de silicona para calmar los llantos, para bebés de 6 a 18 meses de edad. Nuk ofrece y se especializa en todo tipo de productos para niños y bebés. Este artículo ofrece una alternativa para calmar a los bebés intranquilos en periodo de llanto o berrinche. Ofrece dos chupetes con un pezón o una tetina más plana, ya que es acorde a la habilidad de los bebés durante esta etapa. Además, posee una estructura más delgada y estrecha para evitar malformaciones en los dientes durante el crecimiento y desarrollo dental.
Posee detalles luminiscentes que facilitan encontrarlos en lugares oscuros. Puede ser utilizado durante el día o la noche, ya que eventualmente se convierte en una rutina. La caja que los almacena permite un transporte higiénico del producto evitando la contaminación. *El color y diseño del producto pueden variar según la disponibilidad.
Ofrecer al bebé para calmar todo tipo de llantos y berrinches descontrolados.
Silicona
A la hora de escoger chupete recuerda que siempre va a depender de la propia aceptación por parte del bebé. Una de las guías para elegir chupete podría ser el material del mismo: látex (caucho) o silicona.
El látex es un producto 100% natural de color ámbar, y de textura blanda y elástica, que se asemeja más a la sensación del pecho materno. Es un material higroscópico, es decir, que absorbe agua y retiene olores. Al ser un material natural, se desgasta y estropea con mayor facilidad que la silicona. Se recomienda para niños que ya tienen dientes, de 6 a 12 meses.
La silicona médica es un producto químico de color blanco transparente. Es un material duradero, ya que no absorbe olores ni sabores. Su tamaño no varía con el uso, aunque sí podría adoptar colores de los alimentos con los que entre en contacto. Es menos resistente a los mordiscos y tirones del bebé luego se suele recomendar para recién nacidos, de 0 a 6 meses.
Se recomienda sustituir el chupete por uno nuevo cada uno o dos meses y/o desecharlo ante los primeros signos de deterioro como: cambios en el color, alteraciones en la forma y/o deterioro del material.
Es importante saber que no es necesario esterilizar el chupete cada vez que el bebé se lo lleva a la boca, salvo que se caiga al suelo o se ensucie. En estos casos, si no lo podemos esterilizar, simplemente lavaremos con agua corriente, evitando lavarlo con nuestra propia saliva ya que podría contener sustancias antibacterianas.