Yogur en polvo que ayuda a evitar las digestiones pesadas o las molestias gastrointestinales después de comer. Está elaborado con diferentes fermentos lácticos, cada toma, 20 gramos (2 cucharadas soperas en un vaso de agua), aporta más de 6000 millones de probióticos que ayudan a conseguir un equilibrio a nivel intestinal.