Este azúcar natural de flor de coco no refinado, es una buena alternativa al azúcar de mesa o morena. Su color es marrón tostado y se obtiene en Filipinas de forma sostenible y artesanal a partir de la savia de las flores del cocotero.
De todos los azúcares, el azúcar de flor de coco tiene el índice glucémico más bajo. Su sabor acaramelado dulce y suave aporta sabor y aroma a la repostería, batidos y postres de manera natural.