Compota de manzana proveniente de cultivos ecológicos. Su consistencia es suave, no contiene trozos de fruta y con un agradable sabor de manzanas ecológicas. La compota de manzana se puede comer por ejemplo, como postre o en el desayuno en forma de mermelada, además favorece la digestión y aporta fibra insoluble al organismo, idónea para promover el tránsito intestinal.