El xilitol tiene un 40% menos de calorías y 75% menos de carbohidratos que la sacarosa. Es absorbido por el organismo y sucesivamente transformado, con una participación mínima de la insulina es por eso por lo que su índice glucémico es más de 14 veces menor que en el caso de azúcar. El consumo de alimentos/bebidas que contienen xilitol en vez de azúcar garantiza menores niveles de glucosa en la sangre que los alimentos con azúcar. El xilitol debe ser incluido en la dieta de manera progresiva, empezando por cantidades pequeñas. Su exagerada ingesta puede tener un efecto laxante. No es recomendable para los niños pequeños. La forma y el sabor recuerdan el azúcar normal. Varían sus propiedades. El xilitol protege el organismo de muchos daños que provoca el consumo del azúcar blanco.