El aceite esencial de bergamota proviene de un árbol que produce fragantes flores estrelladas y cítricas. Se puede emplear en la cocina gracias a su toque picante a la par que dulce que recuerda al cruce entre una naranja amarga y una lima. Posee propiedades beneficiosas para el sistema digestivo ya que es antiespasmódico, carminativo, laxante, pero también calmante y ayuda a conciliar el sueño.