Sal, orégano, tomillo… Y cúrcuma. Esta especie originaria de la India abandona el curry y se suma a todo tipo de platos. Los beneficios de la cúrcuma son amplios a pesar del desconocimiento que se tiene en occidente de esta planta. Llamada también azufre de las Indias, en este país se usa tanto a nivel culinario como medicinal.
Principales beneficios de la cúrcuma
Mejora la salud de huesos y articulaciones. La cúrcuma alivia el dolor y la inflamación de patologías como la artritis, la artrosis la fribromialgia o la osteoporosis. También protege el sistema nervioso y frena la degeneración de las células nerviosas y así disminuye el estrés, la ansiedad y el decaimiento anímico gracias al aumento de la producción de serotonina.
Mejora la digestión. Tener una digestión pesada no siempre se debe a las fiestas navideñas. El ritmo frenético y descontrolado del día a día hace que muchas veces no se dedique el tiempo necesario a comer con calma, masticar las veces que sean necesarias y tener un proceso digestivo adecuado. Una infusión de cúrcuma mejora la digestión y disminuye la acidez. Lo que hace la cúrcuma es estimular la secreción de jugo gástrico y pancreático para procesar mejor los alimentos. Está indicada para las personas que sufren dispepsia y gastritis.
Evita los gases. La cúrcuma ayuda a expulsar los gases y a aliviar los cólicos.
Protege el hígado. El poder antiinflamatorio de la cúrcuma facilita el drenaje del hígado y el vaciado de la vesícula. Hervir agua con 200 gramos de cúrcuma, dejando reposar la bebida unas horas y filtrándola es una buena manera de consumirla para aquellas personas que padezcan cirrosis, ictericia, enfermedades hepáticas o trastornos en la vesícula biliar. Todo ello gracias a gracias a la presencia de curcumina, ácido cafeico, borneol, eugenol y turmenona, todas sustancias con acción hepatoprotectoras.
Alivia la artritis. De la misma manera, actúa como antiinflamatorio en casos de artritis reumatoide y del síndrome del túnel carpiano.
Previene enfermedades cardíacas. Condimentar tus platos con cúrcuma prevendrá enfermedades cardiovasculares tales como el infarto, además; ayuda a reducir el colesterol malo y los triglicéridos.
Mejora el sistema inmunológico y el sistema respiratorio. La cúrcuma posee una gran poder anti-bronquial que, junto al poder antiinflamatorio ya comentado y al antioxidante, ayuda a tratar la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) y se recomienda consumirla a pacientes con problemas respiratorios.
Regula el ciclo menstrual. En su justa medida, ayuda a regular la menstruación y evita los dolores de los días previos. Si se hace un mal uso y se toma en exceso, impide la ovulación.
Trata problemas dermatológicos. Usada en polvo, la cúrcuma es muy buena para afecciones como hongos o pie de atleta y para la psoriasis.
Contraindicaciones de la cúrcuma
No se recomienda consumir cúrcuma en los siguientes casos:
Durante el embarazo o la lactancia.
Personas con problemas en la vesícula biliar.
Personas que sufren de la enfermedad del reflujo gastroesofárico.
Personas recién operadas ya que retarda la coagulación de la sangre.