Dormir bien
Consejos para evitar los ataques de sueño
Confirmado: La posición en la que duermes puede tener un impacto significativo en tu salud. El dolor de espalda y de cuello, en particular, puede aliviarse cambiando la postura en la que se duerme. Sin embargo, también existen algunos requisitos básicos para lograr un sueño placentero.
Tips para un buen ambiente antes de dormir
¿Sabías que hay algunos aspectos clave que puedes aplicar fácilmente para mejorar tu descanso por la noche? Estos son:
Temperatura entre 18 y 21°C
Habitación oscura
Ambiente tranquilo
Humedad adecuada
Cama suficientemente grande
Sin embargo, si has desarrollado hábitos poco saludables con el tiempo, como poner la televisión o mirar el móvil justo antes de dormir, puede ser útil realizar algunos ejercicios de relajación antes de irte a la cama.
También resulta muy relajante darte una ducha caliente o beber té una hora antes de acostarte, y evitar las emociones fuertes, como ver una película de miedo o de acción. Los ejercicios de respiración o un paseo también pueden ayudarte a encontrar rápidamente el sueño.
¿Has encontrado ya la posición correcta para dormir?
Probablemente siempre te duermas en la misma posición. No obstante, debes ir girándote y cambiando de postura durante la noche. De este modo, evitarás ejercer demasiada presión sobre partes concretas de tu cuerpo. Si te has acostumbrado a una posición para dormir que no es saludable para ti, no te preocupes ¡puedes cambiarla! Las almohadas adecuadas, por ejemplo, pueden ayudarte a conseguirlo.
¿Por qué deberías dormir boca arriba si es posible?
La posturea más saludable para dormir es boca arriba, porque alivia la tensión en el cuello y la espalda y no dificulta la respiración. Además, lo ideal es no utilizar ninguna almohada. Si esto no te es posible porque te has acostumbrado a ellas, opta por una almohada lo más fina y suave posible. Si quieres acostumbrarte a dormir boca arriba, prueba a poner una almohada a cada lado de tu cuerpo.
Sin embargo, si tiendes a roncar o tienes un sueño muy ligero, puede que le resulte difícil descansar al ponerte boca arriba. Si este es tu caso, probablemente te sentirás mejor de lado. No obstante, siempre puedes probarlo durante unos días para acostumbrarte a la nueva postura. Si, además, pones una almohada bajo las rodillas, esto aliviará la presión adicional sobre la columna vertebral.
Dormir de lado
Si duermes de lado, también protegerás la espalda y el cuello, siempre que tu colchón no esté desgastado. Asegúrate de contar con una almohada adecuada para dormir de lado. Importante: No te acurruques en posición fetal, ya que esto supone un esfuerzo excesivo para la espalda y el cuello.
Para mantenerte en la posición lateral, puedes poner otra almohada en la zona de la espalda. Otra almohada entre las rodillas, también, aliviará la presión sobre la pelvis.
Otros consejos para favorecer el sueño
La almohada debe coincidir con la posición en la que duermes, pero debe ser lo más plana posible, ya que cualquier elevación de la cabeza supone un esfuerzo para la zona cervical. La flexión perturba las vías nerviosas, pudiendo provocar un dolor permanente. Si sufres de dolor de cuello crónico o dolores de cabeza, prueba con una almohada más plana para comprobar si notas una mejoría.
Si duermes boca abajo y sientes la necesidad de elevar la parte superior del cuerpo, consulta a un/a médico/a para valorar una revisión de la presión arterial. Esto también se aplica a cualquier otro síntoma que te obligue a adoptar una determinada postura para dormir.
También es conveniente echarle un ojo al colchón. Si está deteriorado, debes sustituirlo; e incluso si aparentemente no lo está, es aconsejable renovarlo cada 10 años. Déjate asesorar por una tienda especializada, ya que el colchón adecuado para ti dependerá de tu peso y de tu posición a la hora de dormir.
