Seguro que alguna vez has oído hablar de las flores de Bach, pero, ¿sabes realmente lo que son?
Las flores de Bach, también conocidas como “remedios florales de Bach” o “esencias florales de Bach”, hace referencia a un conjunto de 38 plantas medicinales no farmacológicas descubiertas por el investigador, médico y homeópata Edward Bach.
Se elaboran partir de una maceración en agua de flores maduras de diversas especies vegetales silvestres procedentes de la campiña inglesa.
Estas esencias naturales se utilizan para tratar diversas emociones negativas, como miedos, soledad, estrés, depresión, impaciencia, falta de confianza… El uso de las flores de Bach basa su eficacia en la teoría de que las enfermedades físicas tienen un origen emocional, y que si los conflictos emocionales subsisten por mucho tiempo, la enfermedad del cuerpo empieza a aparecer.
Sin embargo, al restaurar el equilibrio emocional se resolvería la enfermedad física, lo que da lugar a la terapia alternativa conocida como la Terapia de las emociones.
Después de más de 70 años, las Flores de Bach han sido probadas como un magnífico sistema para tratar los problemas físicos, mentales y emocionales de los seres vivos.
¿Para qué sirven las Flores de Bach?
Las flores de Bach cuentan con una numeración y, a su vez, se recogen en 7 grupos:
- Para los temores: 2, 6, 20, 25, 26.
- Para la incertidumbre: 5, 12, 13, 17, 28, 36.
- Para el desinterés por lo actual: 7,9,16, 21, 23, 35, 37.
- Para la soledad: 14, 18, 34.
- Para la susceptibilidad a la opinión de los demás: 1, 4, 15, 33.
- Para la desesperación: 10, 11, 19, 22, 24, 29, 30, 38.
- Para quienes sufren por los demás: 3, 8, 27, 1, 32.
A pesar de que las Flores de Bach están más orientadas a resolver problemas emocionales y mentales, también tienen muchas otras aplicaciones ¡Y aquí te las contamos todas!
- Mental y emocionalmente: Estas son las aplicaciones más conocidas de las flores de Bach, y donde mejores resultados se encuentran, ya que existe una flor de Bach para tratar cada emoción.
- Físicamente: Permiten tratar predisposiciones mentales y emocionales a determinadas enfermedades.
- Para las mujeres: Actuando sobre problemas físicos y emocionales de este género como son la pubertad, el embarazo, el parto, la lactancia y la menopausia.
- Para bebés y niños: Desde que nace, para su proceso de adaptación al nuevo ambiente fuera del vientre materno, y a lo largo de su desarrollo físico e intelectual.
- En animales: Pueden ayudar a que respondan mejor a situaciones estresantes como cambio de ambientes o la llegada de nuevos miembros a la familia.
- En plantas: Pueden servir para tratar situaciones de estrés, traumas o cambios en el entorno, así como para tratar plagas, enfermedades, o simplemente cuando aparentan estar “tristes”.
Las ventajas de las flores de Bach
Si bien muchas personas y profesionales de la salud aún ponen en duda que el uso de las flores de Bach como terapia alternativas pueda tener algún tipo de impacto positivo en la salud, lo cierto es que, en cualquier caso, tampoco producen efectos perjudiciales ya que:
- No están contraindicadas y al ser completamente naturales pueden usarse junto a cualquier otro tratamiento médico.
- No generan adicción, ya que sus efectos desaparecen cuando el paciente supera el problema.
- Son seguras para todos, incluidos niños, bebés, ancianos y mujeres embarazadas.
¡Descubre las flores de Bach! Y cómo la curación a nivel emocional puede tener repercusiones positivas en otros aspectos de nuestro organismo.