Cicatrices y sol: ¿cómo protegerlas adecuadamente?

Escrito por Celia Núñez el 31/05/2024

cicatriz en la barriga

¿Sabías que el sol y las cicatrices no se llevan bien? Esta es una realidad de la que muchas personas no son conscientes. Las cicatrices pueden dejar marcas permanentes cuando se exponen al sol, y esto puede ocurrir incluso con las marcas más pequeñas, como de acné, varicela, un rasguño, etc.

¿Por qué aparecen cicatrices tras la exposición al sol?

Después de una lesión cutánea o incluso una picadura de insecto, la epidermis de la superficie de la cicatriz es más fina y frágil. Esta zona debilitada es especialmente sensible a los rayos UV durante todo el proceso de reparación de la piel. La exposición al sol puede tener varios efectos nocivos sobre las cicatrices, y estos son algunos de los que debemos tener en cuenta:

  • Hiperpigmentación. Los rayos ultravioleta estimulan la producción de melanina en la piel, lo que puede provocar hiperpigmentación en las cicatrices. Esta reacción se manifiesta como una coloración más oscura de la piel alrededor de la cicatriz, haciendo que la cicatriz sea más visible. El exceso de melanina conduce a la formación de pequeñas manchas marrones, denominadas hiperpigmentación postcicatricial por los dermatólogos.

  • Decoloramiento. Las cicatrices expuestas al sol también pueden desvanecerse, haciéndolas más visibles. Pueden volverse más rojas, más oscuras o más claras en comparación con la piel circundante.

  • Curación lenta. La exposición al sol puede ralentizar el proceso de curación de las cicatrices. Los rayos ultravioleta dañan las células de la piel e interrumpen el proceso de regeneración natural de la piel, lo que provoca una curación más lenta y un período de recuperación más prolongado.

  • Mayor sensibilidad. Las cicatrices expuestas al sol pueden volverse más sensibles y dolorosas debido a la inflamación e irritación adicionales causadas por los rayos UV.

  • Riesgo de complicaciones. La exposición solar aumenta, además, el riesgo de complicaciones relacionadas con las cicatrices, como quemaduras, infecciones o cicatrización anormal.

Cicatriz rosada, roja o blanca: ¿Qué revelan?

El proceso de curación, aunque específico de cada individuo y de cada lesión, incluye varias fases. 

  1. La reacción inflamatoria: la primera etapa es vascular e inflamatoria. La sangre ya no fluye porque se forma un coágulo en la superficie de una herida superficial. La lesión está roja, caliente e hinchada. Durante esta etapa de curación, la piel puede sentirse tirante, con picazón o incluso ardor. Esta fase dura entre 6 a 8 días. 

  2. Reparación de la piel: en la dermis se activan unas células llamadas fibroblastos, que permiten que los tejidos se regeneren. Los bordes de la herida se cierran gradualmente y la cicatriz adquiere un aspecto rosado y suave. 

  3. Remodelación de la piel: la piel no ha terminado del todo de repararse. Las fibras se densifican y solidifican. El proceso de curación finaliza con la formación de tejido fibroso que reemplaza por completo al tejido en ciernes: esta es la cicatriz. 

Una cicatriz rosada o roja indica que suele ser reciente, de menos de 6 meses, mientras que una cicatriz blanca significa que el proceso de reparación de la piel está completo. Por tanto, puedes considerar que tu cicatriz es antigua y que se ha descartado el riesgo de aparición de manchas de pigmentación. Sin embargo, hay que tener en cuenta que esta zona sigue siendo más frágil que las demás. De hecho, será más probable que se queme con el sol.

Durante este período, el sol puede tener un efecto irremediable: la cicatriz corre el riesgo de broncearse y conservar una pigmentación más oscura. Este riesgo es más común en personas de piel oscura, cuyas cicatrices por haber estado expuestas al sol suelen ser más visibles y persistentes. Los rayos del sol también pueden aumentar el riesgo de dificultar la cicatrización y/o favorecer la aparición de una cicatriz hipertrófica, con mayor relieve y endurecida.

cicatriz en la barriga

¿Qué medidas puedes tomar para proteger eficazmente tus cicatrices del sol? 

Ahora ya sabes que es necesario proteger tus cicatrices del sol, pero ¿cómo debemos hacerlo? Aquí van algunas recomendaciones: 

  • Presta atención: mientras la cicatriz esté roja o rosada, aproximadamente los primeros seis meses, está estrictamente prohibida toda exposición al sol. Única solución: cubrir la zona con ropa o una venda si la cicatriz no es muy extensa. En este caso, opta por apósitos de silicona adecuados para zonas móviles, o apósitos de hidrocoloides resistentes al agua. 

  • Utiliza protección solar alta: a partir de los seis meses, cuando la cicatriz adquiera su aspecto blanco, es imprescindible protegerla con una crema solar SPF50 y evitar la exposición solar entre las 11 y las 16 horas, cuando la radiación ultravioleta es más fuerte. También es necesario proteger las zonas sensibles, naturalmente expuestas a los rayos UV, como las manos, el cuello, el escote o incluso el rostro, utilizando sistemáticamente un protector solar sobre la crema de día habitual, en cualquier época del año.

  • No olvides el sombrero: llevar gorra, por ejemplo, y usar manga larga ayuda a proteger eficazmente las cicatrices.  

cicatriz en la barriga

Cicatriz por el sol: ¿Cómo reparar el daño?

¿El daño ya está hecho y tu cicatriz se ha vuelto hiperpigmentada y de color oscuro? Con el tiempo, algunas manchas marrones causadas por la exposición al sol pueden desaparecer, pero a menudo nunca desaparecen por completo. 

En farmacia

El peeling con ácidos glicólico o salicílico puede dar buenos resultados en las manchas relacionadas con el acné. Sobre todo, devuelve la luminosidad al cutis y contribuye a disimular los poros de la piel. Sin embargo, es importante no exponerse al sol con este ingrediente activo. 

Las cremas despigmentantes o antimanchas están indicadas para las manchas marrones. Dan buenos resultados si se aplican diariamente y más bien por la noche, para evitar la exposición al sol.

Con ayuda del dermatólogo

Dermoabrasión

La dermoabrasión actúa como una exfoliación mecánica de la piel, eliminando la capa más superficial para obligar a la epidermis a regenerarse. El procedimiento se realiza con anestesia, y el resultado final se puede observar al cabo de una semana. Después de este tratamiento, no se debe tomar sol durante 2 meses. 

Láser

Si se recomienda láser, la técnica será diferente dependiendo del de cicatriz, y tu dermatólogo la valorará en consulta. 

En conclusión, aunque existen soluciones médicas como el láser, la dermoabrasión o incluso la cirugía, siguen siendo complejas. ¡Aunque proteger tus cicatrices del sol con un buen protector solar es sencillo y eficaz!

Independientemente del tipo de lesión, la protección solar es fundamental, ya que la exposición al sol sin la protección solar adecuada aumenta significativamente el riesgo de cáncer de piel. ¡Protege tu piel!

Artículo traducido por Celia Núñez, redactado originalmente en francés por Sandrine Nail-Billaud.