Con el paso del tiempo vamos viendo que se producen varios cambios en el rostro: falta de luminosidad, de textura, va adquiriendo más arrugas, líneas de expresión, manchas, entre otras cosas. En este tiempo de compromisos sociales como bodas, bautizos comuniones… Necesitamos unos cuidados extra y que actúen de forma inmediata para ayudar a reparar el daño sufrido sobre la dermis y que vuelva a lucir saludable y cuidada.
Los proteoglicanos son de los productos más utilizados anti-edad por sus ventajas y su efecto reparador de la piel. Tienen un doble efecto, uno inmediato dando a la piel apariencia de tersura y luminosidad instantánea, y a largo plazo que consiste en la eliminación de las arrugas.
¿Qué son los proteoglicanos?
Los proteoglicanos son moléculas que se encuentran en nuestra piel de forma natural y que tienen la capacidad de restaurar las células de la epidermis mejorando su apariencia, especialmente su hidratación, elasticidad y firmeza. También captan agua hasta 1000 veces su peso molecular, eso hace que funcionen bien para la piel deshidratada, reactivando la formación de colágeno, recuperando la firmeza y luminosidad. Por otra parte, tienen una acción antiinflamatoria que ayuda a la cicatrización de la piel y aumenta la producción de colágeno.
Las ampollas contienen además de los proteoglicanos, ácido ascórbico. La vitamina C es un excelente antioxidante, ayuda a combatir el fotoenvejecimiento, favorece al anclaje de colágeno y aporta luminosidad. Hayamos también la vitamina F que logra la hidratación adecuada en la piel gracias a los ácidos grasos que la componen.
Este tratamiento corrige las arrugas de cara, cuello y también de otras muestras de fotoenvejecimiento cutáneo prematuro. El Proteoglicano previene la formación de nuevas arrugas gracias al poder antioxidantes de la vitamina C pura, por lo que hidratan, reafirman y reparan.
Cada ampolla se puede dividir en dos dosis, pero no deben durar más de 24 horas abiertas, por ello viene un tapón y un soporte para mantener la ampolla en vertical y cerrada. Se presentan en envases de vidrio topacio porque van compuestas de Vitamina C pura y hay que evitar su rápida oxidación.
A corto plazo:
- Mayor luminosidad e hidratación
- Tersura
- Firmeza
A largo plazo:
- Efecto reparador
- Prevención de arrugas
- Reafirmación
Cómo aplicar las ampollas de proteoglicanos
Tendremos que tener nuestro rostro limpio y fresco. Agitamos la ampolla y aplicamos el contenido sobre la cara y el escote mediante masajes circulares con las yemas de los dedos. Una vez pasado 10 minutos desde su aplicación, podremos retirar con ayuda de un algodón el exceso de líquido que no se haya absorbido. Y ya podremos aplicarnos nuestra crema hidratante.
La cantidad dependerá de cómo nuestra piel absorba el producto, si hay mucho exceso cambiaríamos la dosis. Podemos aplicarnos la mitad de una ampolla por el día y otra por la noche, o bien, en dos días.
Cuando te aplicas el tratamiento en ampollas, la piel lo absorbe con facilidad sin dejar la piel grasa o pegajosa, notas inmediatamente como cambia la piel para mejor. Más hidratada y con más tersura. Por esta razón las pequeñas arrugas se minimizan.
Otro punto importante es la luminosidad que adquiere la piel, se nota más unificada que antes de utilizar el tratamiento en ampollas, un efecto de la alta concentración en vitamina C pura. En cierto tipo de pieles, puede producir la sensación de irritación que desaparece rápidamente. Pero si persiste, se tendría que suspender la aplicación.
Tipos de ampollas de proteoglicanos
Las ampollas de proteoglicanos pueden ser usadas por cualquier tipo de piel y a cualquier edad, siempre y cuando tengan signos de envejecimiento cutáneo y piel seca o deshidratada. En PromoFarma tenemos ampollas para todo los tipos de pieles:
Para pieles secas – deshidratadas
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Para pieles grasas – sensibles
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