El yoga aporta muchos beneficios a todo el cuerpo, incluso en la cara. Hay más de 50 músculos en esa zona y existen maneras de ejercitarlos que ayudarán a tener la piel más firme sin necesidad de liftings con cirugía o inyecciones de bótox.
De hecho, es habitual que las personas que se han sometido a liftings quirúrgicos también opten por tratamientos como el yoga facial para mantener los efectos beneficiosos de los tratamientos durante más tiempo.
El yoga facial se puede practicar solo o bien con la ayuda de herramientas, como la piedra Gua Sha o el rodillo facial de jade.
A continuación, te contamos en qué consiste esta técnica que cada vez está ganando más popularidad que puede mejorar tu apariencia facial en tan sólo 10 minutos diarios.
¿Qué es el yoga facial?
El yoga facial se trata de un conjunto de técnicas basadas en el ejercicio de los músculos faciales y del cuello para mejorar la circulación, oxigenando y nutriendo las células de la dermis.
También estimula la producción de colágeno y elastina, aportando más suavidad, flexibilidad y tonificación.
¿Cómo hacer yoga facial?
Solo necesitas diez minutos al día durante seis días a la semana, los suficientes para conseguir fortalecer el rostro y el cuello.
Elige tu momento favorito e inclúyelo en tu rutina facial: antes de ir a dormir, justo al levantarte… ¡Tú eliges!
Los pasos a seguir son:
Yoga para ejercitar los párpados. En primer lugar, deberemos mantener la espalda recta y mirar hacia arriba alzando las cejas. A continuación, respiramos profundamente y abrimos y cerramos los ojos cada cierto tiempo. Lo ideal sería mantener el ejercicio durante 8 respiraciones y finalizar abriendo los ojos y bajando las cejas a la vez.
Yoga facial para los pómulos, labios, mejillas y mandíbula. Para estas zonas deberemos inflar la boca e ir pasando el aire de un sitio a otro de la boca. Podemos hacer presión con nuestro dedo, pasándolo lentamente hasta que el aire llegue a la otra zona de la boca. Para estirar y tonificar los músculos de la mandíbula, podemos ponernos dos dedos arriba del labio y llenar las mejillas con aire.
Yoga para el cuello. Primero tenemos que juntar los labios y llevarlos hacia fuera, estirar el cuello y llevar la cabeza hacia atrás unas cuantas veces.
Yoga para el cuero cabelludo. Pasar los dedos entre el pelo y llevarlo hacia arriba tirando suavemente de él. Después, repetir el ejercicio por la parte de atrás, con movimientos de abajo hacia arriba.
Yoga para ejercitar la frente. Mantener el cuerpo recto, respirar profundamente y dar pequeños golpes con el dedo sobre la frente. A continuación, subir y bajar las cejas, en repetidas ocasiones.