La bicicleta es el medio de transporte elegido por muchos para moverse por la ciudad, y también una de las opciones más asequibles para hacer deporte. Cada año se venden en España más de un millón de bicicletas, de las que casi la mitad son de montaña, señal de que el ciclismo sigue ganando adeptos. Sus bondades son conocidas por los expertos: “No es un deporte muy agresivo para las articulaciones, ya que carece del impacto que tiene, por ejemplo, el runnning y los repetidos microtraumatismos que conlleva”, asegura Juan Fraile, fisioterapeuta de iQtra Medicina Avanzada, quien aun así advierte: “Tampoco hay que olvidar que la biomecánica articular en el pedaleo es compleja y muy reiterativa, lo que puede dar lugar a ciertas lesiones si no se realiza de manera correcta.
Consejos para ciclistas
El especialista en fisioterapia deportiva de iQtra recuerda a quienes practican ciclismo habitualmente algunos consejos que conducen al entrenamiento ideal:
- Trabajar una buena preparación física y hacer calentamientos previos.
- Llevar una correcta alimentación.
- Hidratarse con frecuencia.
- Ajustar la bicicleta, adecuándola a la biomecánica del deportista.
- Recuperarse mediante descanso y estiramientos.
Además hay que prestar atención a ciertos factores de riesgo antes de empezar a hacer kilómetros, como puede ser sufrir dismetrías en las extremidades, practicar en terrenos irregulares o mantener una postura incorrecta al pedalear, al agarrar al manillar o respecto al sillín.
En el ciclismo podemos encontrar varios tipos de lesiones debidas al sobreuso y al movimiento repetido durante horas combinado con una posición incorrecta bicicleta y una mala técnica.
Las partes del cuerpo que más castigamos al pedalear son las siguientes:
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- Las rodillas son las más afectadas. Las lesiones más frecuentes en esta articulación son la condromalacia rotuliana o la tendinitis rotuliana -por sobreuso-, y las sobrecargas en la musculatura de las piernas. Además, cuando el sillín no está ¿Dónde sufre más lesiones el ciclista? bien adaptado, la zona externa de la rodilla sufre provocando tendinitis de la cintilla iliotibial.
- En brazos es habitual que aparezcan problemas a nivel de hombro y codo por una posición incorrecta del manillar. Si existe excesiva tensión en el codo o la muñeca, puede llegar a producirse un pinzamiento de alguna estructura nerviosa, dando lugar a parestesias y adormecimiento de las manos.
- La espalda puede sufrir lumbalgias -al llevar una posición muy horizontal en la bicicleta-, y cervialgias cuando sucede lo contrario, con una postura muy vertical.
La fisioterapia es imprescindible para la prevención y la recuperación de este tipo de lesiones, asegura el experto. Técnicas como la osteopatía, la masoterapia, estiramientos o la punción seca, logran con éxito descargar la musculatura y corregir disfunciones o tendinitis, entre otras dolencias.<
El fisioterapeuta Juan Fraile recuerda también otro de los peligros de la bicicleta; las caídas, ya que muchas veces desembocan en una fractura de clavícula, uno de los mayores temores del ciclista.