La onagra es una planta medicinal procedente de Norteamérica, de cuyas semillas se extrae el aceite de onagra, empleado desde hace siglos para aliviar diversos problemas de salud.
El aceite de onagra está constituido por ácidos grasos esenciales poliinsaturados omega 6 (cis-linoleico y cis-gamma-linolénico) y no esenciales, como el oleico, todos ellos fundamentales para diversos procesos del organismo. Dado que los esenciales no podemos sintetizarlos en nuestro cuerpo, es necesario ingerirlos a través de la dieta para el correcto funcionamiento celular y cerebral: son precursores de mediadores celulares con función reguladora.
Las propiedades del aceite de onagra están ampliamente descritas. Es antioxidante y emoliente, además de ser un buen aporte de precursores de las sustancias mediadoras que comentábamos. Se utiliza tanto por vía oral, en forma de complemento alimenticio, como para su aplicación cutánea. En este sentido, su gran poder de hidratación y nutrición es muy adecuado para las pieles afectadas por dermatitis, eccemas y sequedad. Alivia el prurito en estos problemas de la piel, agudos o crónicos, que cursan con sequedad.
Como complemento alimenticio, una de sus principales aplicaciones es dar confort y atenuar la sintomatología asociada al síndrome premenstrual y a la menopausia. Los omega 6 que contiene contribuyen a aliviar los síntomas tan molestos causados por el descenso de estrógenos en la menopausia, así como a regular el ciclo menstrual, reduciendo el dolor y la hinchazón premenstruales. En algunos procesos inflamatorios crónicos como la artritis, puede ser una ayuda para disminuir el estrés oxidativo.
Si tomas medicación anticoagulante, el uso de este complemento alimenticio no estaría indicado, ya que tiene acción antiagragante plaquetaria. En caso de duda, consulta siempre antes con un profesional sanitario. Toma los complementos en el contexto de una dieta variada y equilibrada.