La celulitis o piel de naranja se caracteriza por la acumulación y cambio en la estructura de los depósitos de grasa, especialmente en muslos, glúteos y abdomen, que provocan que la piel adquiera un aspecto irregular con nódulos u ondulaciones.
Si bien su eliminación por completo es compleja, sí que es posible reducirla mediante mejoras en los hábitos de vida (actividad física regular, dieta saludable, evitar el tabaco y el consumo excesivo de alcohol...). Junto a estas medidas, podemos aplicar un cosmético de acción tópica con acción anticelulítica y/o reductora, que contienen ingredientes que ayudan a la destrucción de los nódulos de grasa y que mejoran la circulación a nivel local.
Para observar unos resultados óptimos, hay que ser constante en su aplicación y, en el caso de cremas o geles, realizar un masaje vigoroso y en sentido ascendente (sobre piernas o muslos) para activar la circulación. Además, la aplicación de un exfoliante de uso semanal mejorará su penetración. Finalmente, podemos reforzar el tratamiento con la toma de un complemento alimenticio que dé soporte desde dentro.
En caso de dudas, toma de alguna medicación o dolor asociado al problema de celulitis, es importante consultar con un/a profesional sanitario/a.