Para retrasar el fotoenvejecimiento de la piel es vital conocer nuestro exposoma. Como sabrás, la salud de tu piel depende, tanto de factores internos como externos, y estos últimos son los que engloba el exposoma. En concreto, la exposición a la radiación y a la contaminación, nuestros hábitos cotidianos, la nutrición, el estrés y el sueño. Todos estos factores tienen un gran impacto en la salud y la calidad de nuestra piel.
Para que un producto antiage se adapte a tus necesidades, deberá estar pensado para contrarrestar algunos de estos factores. Los demás, dependen de ti, por lo que recuerda tener una dieta equilibrada, hacer actividad física con regularidad, gestionar el estrés y dormir las horas necesarias para que tu piel también pueda descansar.